Cuestiones básicas sobre la educación de los hijos

Ser padres, como tantas veces repetiremos en nuestros artículos, es una tarea que exige responsabilidad, atención, cuidados, conocimientos y un inagotable listado de conceptos y habilidades, que van a hacer de esta faceta de vuestra vida, la más exigente de cuantas hayan existido y ¡existirán!

Ser pedagogos (y los padres los sois por obligación) y actuar como pedagogos, puede guiaros y ayudaros considerablemente en esa función de vuestras vidas.

Como ya se explicó en el artículo  Por qué Pedagogía para Padres desarrollar un plan de acción con la educación de vuestros hijos, a buen seguro hará más fácil, más eficaz y más satisfactoria vuestra experiencia como padres. Seguramente os requerirá un esfuerzo inicial, pero os garantizamos que todo ello quedará ampliamente recompensado por los resultados.

Desde Pedagogía para Padres, intentaremos ayudaros basándonos en nuestra experiencia de muchos años trabajando con la infancia, la adolescencia, las parejas y la familia.

Cualquier acción educativa, sea inmediata o a largo plazo, se apoya en unas sencillas preguntas: Ante una situación dada, ¿qué quiero?, ¿por qué lo quiero?, ¿cómo lo consigo?, o dicho de otra manera, debo tener una intención u objetivo educativo, razones para hacerlo y un método para conseguirlo.

A grandes rasgos y de forma muy resumida, esta es una de las claves de la educación, puesto que educar no debería ser improvisar y sí conocer muy bien lo que quiero y porqué lo quiero. Estos dos primeros conceptos para educar están en vosotros, ya que cada quien tiene sus propias razones de porqué quiere algo en concreto. Otra cuestión es cómo llegar a conseguirlo, por ejemplo, métodos, técnicas, habilidades que podré utilizar para conseguirlo, o, al menos, acercarme lo máximo posible a lo que pretendo.

Lo vemos mejor en el esquema

Resumiendo:

•  Tenemos que tener claro como madres y padres qué comportamiento, habilidad, actitud, etc., queremos que nuestro hijo/a desarrolle.
•  Tenemos que saber por qué queremos que lo incorporen a sus vidas.
•  Por último, tenemos que actuar para acercar o conseguir aquello que deseamos.

Con esta pequeña planificación, vamos a disponer de un apoyo esencial, que va a hacer de nuestra tarea algo más sencillo y sobre todo, más guiado y preparado.

¡Ánimo!, os invito a ir pensando en todo esto, ¡que no es poco!